Es muy habitual ver gente haciendo deporte con coderas, rodilleras, o vendas que tapan lesiones. Aunque podemos lesionarnos por múltiples causas, es importante ser precavidos para evitar, en la medida de lo posible, las futuras lesiones. Sin duda, contar con un profesional que nos asesore y nos ayude en nuestras sesiones de entrenamiento, es fundamental, y nos ayudará a mejorar la salud.
Algunos trucos que pueden ayudarnos a no lesionarnos son:
- Calentar adecuadamente: Es importante, al inicio del entrenamiento, calentar. Si sometemos a un esfuerzo muy alto al cuerpo estando frío, las posibilidades de lesionarnos son tremendas. Por eso, el calentamiento, es una etapa necesaria en cualquier entrenamiento.
- No entrenar más de la cuenta: Cuando entrenamos todos los días, descansando como mucho un día por semana y realizando largas sesiones de entrenamiento, las posibilidades de lesionarnos, aumentan. Cuando exponemos a nuestro cuerpo a situaciones límite, está bajo mínimos, muy dañado y la posibilidad de que algún tejido resulte dañado es mucho mayor.
- No sobrepasar el peso que podemos levantar: Es una de las principales razones de lesión. Un mal movimiento con un peso que no controlamos y es muy probable que nos lesionemos. No hace falta empezar con mucho peso, que además no controlamos.
- Menos repeticiones y mejor hechas: Es tan importante repetir un ejercicio como hacerlo bien. Hay que realizar todos los ejercicios con una buena ejecución técnica. Realizar el recorrido completo, sin llevar el peso a ninguna mala postura que nos pueda dañar o evitar tirones, son unas de las cosas que tenemos que interiorizar si queremos progresar sin sufrir ningún contra tiempo.
- Usar el material adecuado: Es mejor hacer menos ejercicios, pero los que hagamos que incluyan el material necesario. Esto hará que lo hagamos de forma más segura disminuyendo el riesgo de lesión.
- El descanso: Fundamental para llenar nuestro cuerpo de energía y recuperar adecuadamente los tejidos musculares de entrenamientos posteriores. Un cuerpo cansado y agotado, es más propenso a lesionarse. Suena lógico, pero es una de las cosas que se suelen desatender, entrenando a toda máquina aquellos días que no estamos especialmente bien por haber descansado poco.
En definitiva, poner al cuerpo al límite no es la forma más adecuada de hacer ejercicio, sino de lesionarse. Evitar problemas nos ayudará a mantener el cuerpo fuerte y con energía para avanzar poco a poco. ¡Sigue entrenando paso a paso y tu estilo de vida será más saludable y feliz cada vez!