La máquina de remo es una de las mejores herramientas para practicar actividad física, perder peso, quemar calorías y mejorar tu condición física.
Esto es debido a que con la misma se logra activar todo el organismo; brazos, piernas, tronco y cadera se involucran de manera simultánea en un movimiento que consigue hacer trabajar nuestro corazón, pulmones y mente al rendimiento que se considere necesario.
Además, a pesar de que con este tipo de actividad los músculos se estiran y contraen con un amplio grado de movimiento, el ejercicio físico que se lleva a cabo en esta máquina es ideal para personas que necesitan de cierta rehabilitación tras una lesión. A diferencia de otros entrenamientos aeróbicos el uso de esta máquina supone un bajo impacto para las articulaciones dañadas.
El movimiento que se realiza al remar es más suave y rítmico que el que se efectúa en otras máquinas de cardio, como las elípticas o las cintas de correr, lo que lo hace apto para todos los tipos de población. Así pues, se logra trabajar la coordinación, flexibilidad y equilibrio dinámico de las personas más jóvenes, mientras que las personas mayores pueden realizar ejercicio físico sin someterse a grandes esfuerzos e impactos.
Mediante esta herramienta se logra complementar la práctica de otros deportes y puede realizarse tanto durante la temporada no competitiva, para no perder la forma, como durante la competición de la otra actividad para evitar desequilibrios entre los diferentes grupos musculares.
Así pues, es fundamental coger una buena técnica y armar una buena rutina para sacar provecho a la máquina de remo y así no padecer lesiones.